Ruta por Polonia: POZNAN - VARSOVIA - CRACOVIA - WROCLAW

Polonia es un país por descubrir. Cuando nosotros (normalmente, mi pareja y yo) viajamos por Europa solemos elegir el destino dependiendo de lo que nos cueste el avión. No tenemos preferencias y viajamos sin prejuicios. Creo ciegamente que esa es la forma más bonita de viajar ya que luego te sorprendes con ciudades maravillosas y culturas muy interesantes.

En el momento que decidimos ir a Polonia, ésta era la opción más barata para viajar a Europa del Este, por lo que compramos los billetes sin pensarlo. Viajamos Madrid-Poznan con Ryanair en vuelo directo. Lo que nos encontramos: un país muy rico en cultura, con una historia reciente devastadora y su gente encantadora y amigable.

Decir a su favor también, que es un país bastante económico para viajar (alojamiento y comida) y que sus temperaturas en verano (unos 20-25 grados) hacen que sea el destino perfecto si no queremos pasar mucho calor en verano.

Nuestra primera parada fue la ciudad de Poznan, una ciudad con un centro muy bonito y agradable. Con la antigua plaza del mercado (stare Rynek) que sirve de centro neurálgico de la ciudad, es de las ciudades más antiguas de Polonia. 

Una vez paseado y visto Poznan, nos dirigimos a Varsovia, la capital. Decir que es una ciudad que prácticamente ha sido reconstruida en su totalidad (incluso el casco viejo) ya que la invasión alemana y el asedio a la ciudad en 1939 destrozaron la ciudad. En la reconstrucción intentaron utilizar los materiales originales que pudieron y el resultado es bastante satisfactorio. 

Una vez bajas del tren (red de trenes polacos: http://rozklad-pkp.pl/) no puedes dejar de mirar el impresionante edificio que domina el espacio de Varsovia: el Palacio de cultura (Palac Kultury i Nauki). Este impresionante edificio construido en 1952 tiene 231 metros de altura. De factura comunista, Stalin concivió este edificio como un regalo que los soviéticos hacían a los polacos, aunque éstos lo vieran como un símbolo de dominio de la URSS. Se puede subir a la planta 30 del edificio, lo cual cuesta 10 zlotys (unos 2,5 euros).

                                     (Vista desde el Palacio de Cultura)

Otro sitio al que merece la pena ir es al Palacio Wilanów. Fue construido en el Siglo XVII. Se puede pasear lospor los jardines que lo rodean y las visitas al interior sólo se pueden hacer con guía. El parque abre todos los días de 9:00h a 16:00h, hasta las 19:00h los Domingos. De Mayo a Septiembre abre hasta el anochecer.

Destacar que polaco era Chopin, y en Varsovia, está el museo dedicado a este músico.Aparte, en el parque Łazienki hay una escultura en su honor.

Llegados a este punto, he de comentar que soy una apasionada de la historia del S.XX, y en especial de la II Guerra Mundial. Varsovia tiene uno de los guettos judíos más conocidos de Polonia (junto con el de Cracovia) y como no, fuimos a visitarlo. Mucho ha cambiado este barrio pero todavía se pueden observar algunas calles originales que pertenecieron al guetto que impresionan.

                                         (Calle del guetto de Varsovia)

Nuestra tercera parada fue Cracovia. Es una ciudad que engancha a la primera. La cantidad de gente que hay en sus calles es impresionante, y hace que te sientas en casa desde el minuto uno. Eso sin hablar de la belleza de esta ciudad, comparable con la de Praga, por ejemplo.

                                          (Rynek Główny - Plaza del mercado)

Una vez en llegamos a Cracovia barajamos la posiblidad de ir Auschwitz. Desde Cracovia hay excursiones de un día a este campo de concentración ya que se encuentra a 70km de distancia. Ya habíamos estado en varios campos de concentración nazis (incluso realicé mi trabajo de fin de máster sobre el campo de concentración de Buchenwald) pero ir a uno de los mayores centros de exterminio creado por el ser humano era para pensárselo. Finalmente decidimos ir y aunque hay que ir concienciado es una visita que merece la pena. Yo siempre digo que hay lugares especiales, donde sientes una energía diferente. Por ejemplo, uno de esos lugares es el Coliseo de Roma. Para mí, Auschwitz tiene ese mismo tipo de energía donde no te queda otra que respirar profundo y ser consciente de la importancia del lugar.

Por último visitamos Wroclaw. He de decir que aunque es una ciudad bonita, para mí fue la más prescindible de las 4. Destacar el centro, muy colorido, y lo divertido de ir encontrando gnomos por la ciudad. Unos están bien visibles pero otros están más escondiditos...

Polonia es un país que merece la pena ser visitado, lleno de color y contrastes. Como anécdota contar que mientras estábamos comprando en un supermercado en Varsovia, una chica al oírnos hablar español se acercó a nosotros y nos preguntó que hacíamos allí. Nosotros la dijimos que estábamos de turismo y ella nos contestó: ¡¡Pero si todos los polacos vamos a España  de vacaciones!! ¡¡Que aquí hace frío y no hay playa!!